
En las áridas regiones de la baja california (no, no es el corrido de la palomilla), andaba un señor ranchereando, sabrá dios por cual recóndito rincón de la baja sur andaría…
El punto es que andaba ranchereando y que llega a un rancho, por el olor que le llegaba se notaba que estaban haciendo tortillas de harina (malayón una con cachetada de frijol!!!)
Entonces el señor así como no queriendo la cosa llega al rancho y después del saludo 100% choyero, llega con la señora a la cocina y verifica que están haciendo tortillas de harina, y se lleva
a cabo el siguiente dialogo
-Señor ranchero rancheando en la baja sur: ¿está haciendo tortillas de harina? (con cara de… ¿y no me van a invitar??)
-señora ranchera de la bajar sur: ¡ecole! Y me están quedando ¡rewenas!, ¿quiere una?
-Señor ranchero rancheando en la baja sur: pero por supuesto pariente que quiero una (con una cara de… ¡pushi que hambre!)
La señora ranchera de la baja sur le da la tortilla al señor ranchero rancheando en la baja sur y se le queda viendo a la tortilla con cara de… ¿y ahora? ¡Cómo que le hace falta algo a esto! Y desde su hondo pecho le dice a la señora…
-Señor ranchero rancheando por la baja sur: ¡ ¡ ¡ ¡ ¡ MEEEEEEH ! ! ! ! ! ¡ ¡ ¡ ¡ ¡ ME LA DIO SIN QUESO ! ! ! ! !